CARTA DE UN ÁRBOL EN 2050

Hola, seguramente ya no me recuerdes y quizá me extrañes, después de todo estuve contigo en cada etapa de tu vida. Cuando naciste fui tu cuna y te mantuve caliente. ¿Recuerdas el lápiz que usaste en la escuela para escribir tus primeras palabras? Tal vez no, pero yo sí lo recuerdo. Tu letra no era la más bonita, pero me sentí orgulloso por ti. Envolví las muchas cajas de chocolates que por algunos años fueron el regalo ideal para tu mamá en su cumpleaños, navidad y día de las madres.

Pasaron los años y apareció tu primer amor, recuerdo que tenías muchos nervios así que escribiste en mí muchas cosas bonitas que probablemente hoy te reirías al recordarlas. Secaste tus lágrimas conmigo cuando te rompieron el corazón por primera vez. Te serví de asiento en esas largas noches de estudio y guardaste tu sueño sobre mí. Fui la puerta de tu casa y mis frutos el café de tus mañanas. Te di sombra en los días soleados y buscaste refugio bajo mis hojas en los días lluviosos. Purifiqué el oxígeno que respiras y mejoré la calidad del agua que bebes. Y a pesar de todo lo que hice por ti, cuando te contaron de lo afectado que estaban mis bosques y cada año mataban a más de 15 mil millones de los míos grité por tu ayuda, pero tu respuesta fue darme la espalda, por qué después de todo pensaste que tú ya no ibas a estar aquí para vivir las consecuencias de tu indiferencia.

Firma, un árbol.

Los arboles han estado en la Tierra por más de 4500 millones de años, 22500 veces más que nosotros. En realidad, ellos no necesitan de nosotros, pero nosotros, sí de ellos. Como elijamos vivir cada día, a los árboles realmente no les importa, porque después de todo son parte de la naturaleza y la naturaleza siempre está preparada para evolucionar con o sin nosotros. Si quieres que esta carta no sea una realidad, quédate atento a nuestras redes para saber cómo ayudar.